Hay dos tipos de chicas en este mundo, la chica femenina y la marimacho. Cambiar de lado nunca es fácil, ¡pero a veces puede ser divertido! Nunca deja de sorprenderme. Tengo cuatro chicas y no dos de ellas son remotamente iguales. Tengo uno que preferiría golpear el lodo y revolcarse en él toda la tarde y otro que quiere usar vestidos de capucha de Pascua en el patio de recreo.